lunes, 25 de mayo de 2015

5 dobles y 1 rígida

o también salida trambólica por el Montseny...

Después de varios meses sin escribir nada, por fin he encontrado el momento de desempolvar el Blog. Desde la mítica crónica de la Orrienca Sangrienta (9 de noviembre) que no he podido escribir nada, y no por falta de ganas. Últimamente tengo poco tiempo y cuesta encontrar el momento. Por suerte, la semana pasada decidimos hacer una salida de las de verdad. Algunos recordaréis la salida que hicimos por el Montseny a lo Pons Style. Como nos gustó tanto el domingo pasado fue el día escogido para repetirla y así poder poner a prueba mi nueva bici de pruebas, una Cannondale Scalpel 2015.



el grupo lo formaban los ultras (Marcos y Javi) y el incombustible Pajaritu. Ellos decidieron salir desde Mataró para ir estirando patas y el resto del grupo, con Cacaito, Pere y yo, les esperábamos en Cánovas, porque llegaríamos en coche. Aun saliendo con 1 hora de margen casi llegan antes que nosotros, no digo más. Nos encontramos en el parking de la entrada del pueblo, nos vestimos, llegan los ultras y roure y ala, para el bar. 40 segundos de ruta y ya paramos a comer algo, por lo de repostar y esas cosas...

el Garmin no falla. 44 segundos y parada a comer algo



Poco después empezamos la ruta y al igual que la vez que la hicimos con Ultrajavi, la ruta no tiene ni un sólo descanso. Empieza subiendo mucho, pero mucho de verdad, con rampas duras de narices. Además, cómo los ultras estrenaban bicis (Orbea Oiz) tenían ganas de guerra, así que a chepazos desde el kilómetro 1. La primera subida digamos que está bien, no es que sea suave, pero como vas fresco todavía aguantas. Lo malo es que yo venía de cenar fuera esa noche, con sus consiguientes copitas y demás. Dormir poco y comer fuerte, mal asunto para salir de ruta. Una vez arriba de la primera subida empieza una bajada bastante guapa. Empieza suave pero acaba convirtiéndose en una trialera mega guapa, con mucho desnivel y pasos técnicos. Ahora entendéis lo de Pons Style? La cosa es que el camino cada vez se pone peor, pero es tan divertido que da lo mismo. Tira de chepa y pabajo. Una vez abajo ya tuvimos el primer contratiempo. Javi y sus radios rotos...Por suerte las llantas de carbono no se descentran fácilmente. Un poco de bajada por pista, un susto guapo a un padre-hijo y listos, ya estábamos en Can dosrius, a puntito de empezar a subir hacia el Tagamanent. Lo curioso es que siendo un sitio tan chulo no parásemos a tomar nada, ni una triste barrita. Como lo que quedaba era suave...

fallo mecanico


radio roto



La subida al Tagamanent es de aquellas trambolikas. No para de subí y subí. Te pasas media hora tirando de chepa, riñonazos y de tó. No llegas nunca al final, la parte más guapa. Cuando llegues a una zona con un desnivel de alucine veréis que hay unas placas de cemento. Allí es cuando estáis a puntito de coronar, pero hasta allí... La cosa es que por una vez en la vida, fijate tu como son las cosas, en la grupeta predominan las dobles. Más allá de la vetusta doble del roure, con 15 kg y los mismos años/fisuras, están las nuevas Oiz de los ultras, pero lo que más choca es ver a cacaito con una doble. Si ya daba miedo bajando con el potorro de començal, imaginate ahora bajando con una flamante Giant Anthem...Es que da miedo. Por mi parte mi compañera de viaje no puede ser mejor, una Cannondale Scalpel montada a tutiplen. X01, lefty, ruedas ZTR, componentes de carbono...vamos, una joya. Lo único que le he cambiado de serie han sido las cubiertas, pero el resto es simplemente perfecto. Cómo va la Cannondale!!!! Fijate tu si va bien, que fui chino chano, haciendo fotos y hablando con los lugareños y llegue apenas sin sudar arriba. No pueden decir lo mismo Cacaito el nuevo doblero o Pere "tu eres de los míos", el único que aun resiste en rígida. Estos dos vieron la muerte de cerca, en forma de pájara...En fin, es que sin una lefty, las cosas se ven diferentes...jajajaj

Como va la Scalpel!!!




una vez arriba y después de ver como pajaritu llegaba tan sobrado que le daba tiempo a pasar por el aseo antes de que llegara el primero, nos fuimos directo para el bar del Tagamanent. El sitio es precioso, pero el puñetero bar está siempre cerrado. Ese día no. Nos pegamos un homenaje en forma de coca-cola y cerveza, amenizado con un generoso bol de cacahuetes (1 por cabeza). Las vistas son geniales, el tagamanent se ve de cerca y la tranquilidad que se respira es de lo mejor. Vale la pena llegar hasta allí. Lo mejor es que después del copazo nos tocaba remontar un poco hasta el pla de la calma y bajar de nuevo, esta vez por la bajada más puta de todas.

parada tencica en el bar


las vistas del bar son tremendas, que paz...

con el tagamanent de fondo

si es que me pide guerra!

asi se ve la vida diferente...



Llegados al Pla venía lo bueno. Una bajada de aquellas que patrocina una tienda de recambios. Todo son bolos de piedra, escalones de medio metro y desnivel a tope. Además el claroscuro del bosque unido a lo seco del camino hacen que todo esto sea la repo...a. Es chunguisima la jodía, así que más de uno puso pie y alguna mano. Esta bajada sale a una pista, la típica que deseas que llegue porque vas crujido y estás harto de jugarte el tipo en cada curva. Total, que llegas a la pista, ruedas 3 metros y te sales para meterte en un corriol mega chungo. ole Tu!! Los primeros metros son de subida, a pata, hasta que medio coronas y puedes pedalear. Ahí si, ahí si que lo disfrutas. Menuda bajada, rollo técnico igual, pero mucho mas divertida. Tiene hasta flow! lo que pasa es que si te caes sangras, y no mola. Se va con cuidado y punto. Para variar, la lefty me pide guerra y no paro de enlazar curvas con un flow, un estilo y un respeto...jajajaj. De verdad, como va la perra! y este orgasmo senderil desemboca en otra pista, rápida, con curvas anchas, velocidad... y es ahí donde notas que se acaba la ruta. Corriol a la izquierda y para abajo, pero literalmente. Aquí, en la última es donde más disfrutas. Mucha inclinación, pasos complicados y mucho tacto con el freno, a lo cacaito Style. sobretodo hay una Z...que si vas un poco colado catapún. Una vez abajo nos miramos las caras y rápidamente sabes que la bajada ha sido de 10. Sólo hace falta ver qué caras ponen los compañeros para saber que volveremos. Esperamos a que llegue ultramarcos y nos enseñe las marcas de haberse revolcado por el suelo y listos. Ya estamos de camino a Canovas con una sonrisa en la cara. Poco después una cervecita en la terraza del bar y a disfrutar, que nos lo hemos ganado.



ala, hasta la próxima!


asi queda la Cannon despues de un ruton

No hay comentarios:

Publicar un comentario